13 de noviembre de 2007

Validadores humanos que no cumplen su función

La denuncia de éste último trabajo trata sobre la mala función que desarrollan los denominados “validadores humanos” en las horas punta (en la mañana desde las 7:30 hasta las 9 horas y en la tarde desde las 18 hasta las 20 horas) en el paradero ubicado a las afueras de la Estación del Metro Baquedano, el cuál es utilizado por las líneas 303, de la Empresa Buses Metropolitana y 307, de la Empresa Alsacia, que son recorridos que van desde la comuna de Santiago hasta la de Quilicura.
Cuando comenzó éste plan de transporte se decía que: “Transantiago significaría cambios sustantivos en la vida cotidiana de millones de personas. Disminuirá la congestión, contaminación e inseguridad de la locomoción colectiva”. Esto además está “orientado a satisfacer los requerimientos de movilidad, accesibilidad y calidad de vida de los todos ciudadanos”. Sin embargo, las personas que residen en la comuna de Quilicura y que necesitan tomar su bus en el paradero de Baquedano, experimentan a diario, exactamete todo lo contrario a dichas promesas.
Según datos entregados por los propios monitores que trabajan en aquel lugar, son alrededor de diez los que se encuentran en dicha estación organizando que todo funcione a la perfección. Pero, de estas diez personas sólo dos tienen un trabajo estable, el cual es tratar de no dejar pasar a ningún usuario sin validar su tarjeta bip. Los otros ocho, en cambio, sólo se dedican a leer el diario y a conversar mientras la gente se pelea por tomar una micro.
Por otra parte, comparando estos datos con los entregados por los monitores de Transantiago ubicados en el paradero de Santa Rosa con Alameda, la cantidad de personas que transitan en horas punta en aquel paradero es más o menos similar a la de Baquedano, esto quiere decir 150 personas por hora. No obstante, en éste paradero la cantidad de monitores llega a sólo cuatro personas, las cuales sí logran ejercer de buena manera su labor. La razón: se encargan exclusivamente de que la gente valide su tarjeta bip, haga fila para tomar la micro ordenadamente y así no provocar aglomeraciones.
Para concluir, es necesario señalar que aunque en ambos sectores transita la misma cantidad de público en horas punta, la diferencia es que en el paradero de Santa Rosa la gente posee una cultura de respeto por los demás, debido a la óptima función que ejercen los “validadores humanos”, a diferencia de lo que ocurre en Baquedano.

No hay comentarios: